El rincón del alma
Sueños rotos
Hierve la sangre turbia de la noche,
recorriendo cada poro de la piel,
mientras esta se deshace derramando gotas de deseo;
intenso, pasional.
Encarcelame en tu vida de sueños rotos,
porque roto es el silencio de los corazones
cuando dejan de latir por la angustia del placer.
Impaciencia ante la satisfacción de lo inalcanzable:
El amor verdadero.
Ese amor que resuena como un tambor de hojalata
en las almas del purgatorio, almas solitarias;
decadentes en el desierto del éxtasis
donde arremeten las espinas dejando manar la sangre
de los corazones hasta secar los sueños rotos.
Condenados en la agonía,
siguen divagando los ardores del deseo
buscando encontrar el sosiego de las caricias.
¡¿Dónde encontrarte?!
¡¿Cómo puedo satisfacer mi espíritu!?
o ¿es que sólo puedo recorrer la temblorosa cuerda
del deseo sin saber si estás ahí...amor verdadero?
bushido 2009
Silencio
Silencio;...
Tú que lloras cuando caen las hojas otoñales.
Tú que respiras en las taigas invernales.
Tú que naufragas en el autismo de la mente.
Tú que sobrevives a tempestades,
agujeros negros y eres eterno.
Tú que peregrinas en los oscuros
abismos de las profundidades del mar.
Tú que deshorientado e inherte,
te mueves entre universos estelares.
Tú que te cobijas en el centro de la tierra
y te reflejas en la luz del sol.
Tú que apareces en los corazones
desgarrados por el desengaño.
Tú, al que todos temen al final del camino
y al que todos buscan cuando aparece el crepúsculo.
Sólo en ti puedo confiar,
tú nunca traicionarás mi alma;
tú nunca me pedirás nada a cambio;
Sólo...silencio.
bushido 2009
Mi alma, mi lastre, mi condena
Mi alma, mi lastre, mi condena.
Tu faro me guía,
y me arrastra en el fervor de la corriente
hacia el profundo abismo de una encrucijada.
¿Qué camino he de seguir?...
Si siento latir mis ojos en los tuyos,
rozar el crepúsculo cuando tus labios me miran,
tus miradas me susurran
y tus manos enmudecen mis sentidos.
Incontinencia de deseo desbordante,
pasión eterna que sesgas mi corazón
escarchado como cristales rotos.
¡Libera mi alma!
¡Suelta el lastre que me une a tal dilema!
Mi pecho oprime mi agonía
cuando veo tu piel de marfil
alumbrando como una estrella fugaz
los oscuros abismos de la vida.
Se eriza mi bello al oir
una sola letra de tu lúcida palidez.
Mi alma, mi lastre, mi condena.
En éste duelo de amor alguien saldrá malherido,
¿cómo saber si en un futuro no secaré tu corazón?,
amor eterno.
Siento enloquecer de momentos.
Siento devanecer al final del día,
como desvanece la llama
incandescente de mi corazón.
Soledad púrpura,
tu me llevas en peregrinación
hacia el insomnio de la vida.
Mi alma, mi lastre, mi condena.
Condenado a la ciranía
por los pesares del alma mía.
Amor inmortal;
tú eres...poesía pura.
Triste el destino sin saber de tus versos,
sin mortalizar mis sentimientos.
bushido 2009
L'Alba
Al calor del alba encontré el amor.
Matices cálidos suenan en mi corazón.
Despechada juventud
que con desparpajo me atraes
y sin red me anhelas en tu regazo.
Tu hermosa lumbre me persigue en mi vigilia
deseando despertar anudado al alba.
Tierno amanecer de ilógica sensatez.
Tu fuego reavivó mis ascuas
con el oxígeno de tu boca y el brillo de tus ojos.
Sensuales sombras de ninfa
que con el crepúsculo matutino
se desvanecen como el humo al viento,
como la pasión al desencanto,
como la vida a la muerte.
¡ No me dejes sin tus labios!
¡No me abandones al alba!
Cuando germine el sol se eclipsará el amor
y quedará en un recuerdo perpetuo,
esperando a ser redimido.
bushido 2011